viernes, 11 de diciembre de 2009

cap.3

Lo primero que vi fue aquel ser decrepito de incalculable edad más parecido a un cadáver fresco
que a un hombre con una perturbante y asquerosa hendidura donde se supone su globo ocular derecho
debería existir para convivir con el izquierdo y proporcionar la, al parecer sobre valorada vista. Estaba repleto de coágulos sanguíneos mostrados
orgullosamente como si hubiera perdido este en alguna clase de batalla y fueran medallas
que mostraban su honor. Se veía claramente que no había tenido
atención médica alguna en años, y gracias a eso pequeñas formaciones de moho se alcanzaban
a observar al acercarse demasiado a el, así que procure no hacerlo por mantener mi
paz mental. tenía una cara que mostraba no un
rostro que se podía asegurar humano, mas bien era una extensa y difícil recopilación de años
,experiencias que parecía colgaban de cada una de sus miles de bien formadas arrugas
que armoniosamente invadían el rostro de aquel individuo, ese rostro anciano
en su mayor parte cubierto por una extraña barba blanca la cual descendía hasta su pecho y
era lo único inexplicablemente impecable, perfecto, planeado en su
físico, bien peinada,cuidada y libre
de cualquier partícula de suciedad como si esta representara las ultimas gotas de vida humana
en su persona,la división que lo permitía seguir en nuestro mundo y no ser secuestrado
por la entrega del inframundo, lo que era todo lo contrario de su cabello aunque no fuera mucho
y formaba una clase de sombrero de carne moteada y arrugada que casi llegaba a sus orejas, la pobre
escasa, sucia y también blanca cabellera la cual descansaba tranquilamente sobre su espalda baja
,pero fue impresionante al darme cuenta que con solo ver su rostro me eran transmitidas millones
de experiencias, una confusión mental que casi me hacia sentirme como su físico, una energía
de una cantidad casi fatal que te hacia tener una sensación de que te succionaba la vitalidad,
la vida con cada segundo que pasaba mirándolo. Su delgado cuerpo cubierto con un grueso tejido
de estambre sobre el cual tenia una sucia gabardina gris, la que parecía haber estado en el basurero
por años a merced de animales y montañas de desechos la cual cubría en su totalidad los brazos
y dejaba asomar una mano izquierda mutilada con el dedo índice y pulgar unidos por una carnosidad
extraña, la cual metió rápidamente en sus pantalones que mas que eso parecían trapos sucios
desesperadamente cocidos por un ser que se empeño por mantenerse caliente a toda costa, y su pobre
par de sandalias, mas que nada decorativas ya que dejaban al descubierto
sus podridos y desgastados pies, que mas que eso parecían dos bolas de carne mohosas donde
de vez en cuando se asomaba alguna opaca uña

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